18 marzo 2008

El escándalo de la foto falsa colombiana

Foto falsa y cortina de humo

Jaime E. Olivares

Pocas veces el gobierno colombiano ha sufrido un bochorno tan grave como el de esta semana. La famosa foto con que los diplomáticos de esa nación sudamericana trataron de convencer a los miembros de la OEA de que altos funcionarios ecuatorianos tenían vínculos con la guerrilla de las FARC, resultó ser falsa.

La delegación colombiana a la Organización de Estados Americanos (OEA) presentó este lunes, en Washington, una foto hallada en la computadora del fallecido líder de las FARC, Raúl Reyes, en la que –según aseguraron- el dirigente revolucionario aparece junto al ministro de Seguridad ecuatoriano Gustavo Larrea.

Ecuador negó de inmediato cualquier relación del gobierno con el grupo guerrillero colombiano, pero pocos –en principio- le creyeron. Especialmente porque Estados Unidos dio su completo apoyo a Colombia en el ilegal ataque aéreo y terrestre contra un campamento de las FARC en territorio ecuatoriano.

Después de todo, Estados Unidos tiene un historial de no respetar la soberanía territorial de otros países. Por ejemplo, el caso de Panamá en 1989, el de Granada en 1983, y el más reciente de Irak en el 2003, sin mencionar una docena de intervenciones armadas más antiguas.

La falsa evidencia presentada por Colombia se desmoronó el mismo lunes cuando el secretario del Partido Comunista Argentino, Patricio Echegaray, dijo que el que aparecía en la foto con Raúl Reyes era él y no el ministro de Seguridad ecuatoriano.

El diario El Tiempo, de Bogotá, fue el primero en disculparse por haber publicado la foto de Echegaray con Reyes con la información falsa de que el que aparecía en ella era el ministro Larrea.

Texto de El Tiempo, publicado el 18 de Marzo del 2008:

El día de ayer, este diario publicó una fotografía, extraída del computador de 'Raúl Reyes', suministrada por una fuente de la Policía, cuyo pie de foto decía: "En la foto encontrada en el computador de 'Raúl Reyes', el ministro de Seguridad del Ecuador, Gustavo Larrea, dialoga con el guerrillero". El texto de la información respaldaba esta versión. Copias de la foto se repartieron en la cumbre de cancilleres de la OEA, donde generaron un encendido debate.En realidad, el personaje de la fotografía no es el ministro Larrea, sino el dirigente comunista argentino Patricio Etchegaray, como quedó establecido ayer, cuando ya la publicación se había difundido ampliamente. Un error lamentable, que reconocemos sin vacilar y que, más allá de EL TIEMPO, afecta la credibilidad de la causa colombiana en el debate diplomático en la OEA y las múltiples informaciones, varias de ellas comprobadas, encontradas en los computadores de las Farc. El tema, además, apunta a una cuestión de fondo del periodismo: la relación con las fuentes y la atribución de las informaciones.

Pero, más allá de las intenciones de la fuente al entregar la foto y de sus eventuales repercusiones políticas hacia la reunión de la OEA, este diario falló en sus procedimientos de verificación (una cosa es un parecido, otra es que se trate de la persona en cuestión) y falló al no atribuir claramente la información a la fuente, en lugar de asumirla como propia. Un doble error que afecta la credibilidad del periódico y que nos obliga a reforzar los mecanismos internos de verificación y control para que esto no vuelva a ocurrir. Y que nos lleva a pedir, desde este espacio, excusas al ministro Gustavo Larrea y al gobierno del Ecuador.

El codirector del diario colombiano El Tiempo, Enrique Santos, Calderón reconoció el martes que al publicar una foto en la que se informaba erróneamente de una cita del ministro de Seguridad de Ecuador, Gustavo Larrea, con un guerrillero de las FARC, se cometió otro grave error y es “que no decimos de dónde provino la foto. Hemos debido decir esta foto fue suministrada por una fuente oficial”.

La foto fue obtenida, aparentemente, a través de fuentes policiales colombianas que tenían acceso a la computadora del guerrillero muerto Raúl Reyes.

La Policía Nacional colombiana emitió el siguiente comunicado:

1. Asumiendo que la fuente que suministró la información corresponde a un funcionario de la Policía Nacional, según lo manifestado por el diario ( EL TIEMPO), la Dirección General quiere precisar que la fotografía no ha sido entregada oficialmente a los medios de comunicación y desconoce los canales a través de los cuales se hizo pública.
2. Como se conoce públicamente, el proceso de investigación forense y de análisis se ha iniciado bajo la responsabilidad de peritos y con el acompañamiento internacional, y serán estas instancias las que en definitiva comunicarán a la opinión pública los contenidos de la información recuperada en el campamento.
3. La Dirección General ha ordenado una investigación interna en el entendido de que la información relacionada con los computadores hallados en el campamento de Raúl Reyes ha sido manejada con toda responsabilidad, y el propio Director General ha presentado de manera pública y directa algunos de los contenidos descubiertos en esos dispositivos.

Por supuesto, la declaración de la Policía Nacional no alude en ningún momento al hecho de que esta foto fue utilizada por la delegación colombiana en la OEA para tratar de justificar y tender una cortina de humo sobre la violación del territorio ecuatoriano por parte de la Fuerzas Armadas de Colombia, ocurrida el 1 de Marzo del 2008.

En dicho episodio, la Fuerza Aérea Colombiana atacó con misiles un campamento guerrillero de las FARC en Ecuador, matando a Reyes, el dirigente número dos del grupo insurgente colombiano, y a por lo menos otra docena de militantes, incluyendo cuatro estudiantes mexicanos.

La acción provocó una airada reacción de los gobiernos de Ecuador y Venezuela, que enviaron tropas a sus respectivas fronteras con Colombia.

La OEA evitó que el conflicto se convirtiera en una guerra abierta entre Colombia y sus dos vecinos, pero falló en satisfacer las demandas ecuatorianas sobre una condena a Colombia por violar el territorio de Ecuador. Este país ha decidido, por ahora, no restablecer las relaciones diplomáticas con Colombia.

2 comentarios:

gataeneltejado dijo...

Saludos de una colombiana desde Ecuador.

Lo que pasa es que uno como periodista también debe preguntarse cuando le traen una “primicia” a quienes les conviene y a quienes les afecta que salga esa información a la luz.
Muchos colegas caen en la tentación de la fama rápida por alguna “chiva” como la llamamos en Colombia y al final pasan por la verguenza de tener que rectificar algo que fue maquinado con saña o para ejercer presión pública negativa sobre un evento o persona. Nos dejamos manipular.

La verdad es que esta pasará a la historia como una de las rectificaciones más vergonzosas tanto por los vínculos de la familia Santos con el gobierno colombiano como por la terquedad de demorar las excusas hasta el día siguiente cuando desde la mañana todos sabíamos que el hombre de la foto definitivamente NO ERA.

Saludos!

Jaime E. Olivares dijo...

Gracias por tu comentario, colega. Uno de los principios básicos del periodista es verificar lo que te dicen tus fuentes.

Saludos

Jaime